Moshé le pidió al pueblo que traigan aceite apto para la Menorá
el cual debía ser de las primeras gotas de la aceituna, ya que es el más puro.
El único que cumplía las condiciones era el que trajeron los príncipes de las
tribus. Sólo un Cohén puede encender, limpiar o preparar la Menorá.
Hashem ordenó que hicieran las prendas de los Cohanim: cada
uno tenía 4 y el Cohén Gadol 8.
Hashem designó a Aarón como Cohén Gadol. Algunas de las
reglas del las prendas de los Cohanim:
· Sólo el Cohén
puede usarlas (no un Leví ni un Israel).
· Sólo son usadas
en el Mishkán o Beit HaMikdash
· No se puede
dormir con ellas puestas
· Debe usar
específicamente las prendas dichas, si no son así, es lo mismo que nada.
Los Cohanim y el Cohén Gadol usaban prendas distintas, no
solo en número, sino que también en tipo.
1. Túnica
(Ketonet): Estaba
hecha de lino y llegaba hasta los pies.
2. Pantalón
(Mijnasaim): Era
corto y de lino.
3. Sombrero
(Migbaat): Alrededor
de su cabeza se colocaba una cinta de lino, la que daba muchas vueltas hasta
terminar en punta.
4. Cinturón
(Avnet): Era muy
largo, media 19 m. aprox. Daba varias vueltas a la cintura del Cohén y era de
color.
Prendas del Cohén Gadol:
1.
Túnica (Ketonet): Estaba hecha de lino y llegaba hasta
los pies.
2.
Pantalón (Mijnasaim): Era corto y de lino.
3.
Sombrero (Mitznefet): Alrededor de su cabeza se colocaba una cinta de
lino, la que daba muchas vueltas, pero terminaba chato.
4.
Cinturón (Avnet): Era muy largo, media 19 m. aprox.
Daba varias vueltas a la cintura del Cohén y era de color.
5. Delantal
(Efod): Estaba atado
de adelante y puesto por atrás. Era tejido en muchos colores. Se agarraba de
dos breteles que pasaban por los hombros, sobre los cuales, en cada uno de
ellos, habían una piedra preciosa con seis shevatim (tribus) escritas.
6. “Joshen”,
placa que cubría el pecho: Estaba sujeto a dos cadenas de oro que colgaban de los breteles del
delantal. Era cuadrado y tejido por dos
telas, entre las cuales se formaba un bolsillo, que contenía un pergamino con
el nombre de Hashem. Sobre el (el Joshen), habían 12 piedras preciosas, donde
estaban escritos los shevatim
7. Campera
(Meil): Era de tela
azul y en su borde habían colgadas campanitas, cada dos, habían una granada
tejida.
8. Faja para cubrir
la cabeza (Tzitz):
Antes acostumbraban a usar el Tefilín todo el día, el Cohén Gadol, aparte de
ello, usaba una faja de oro que tenía grabado “Kodesh laHashem”, santo para
Hashem.
No usaban zapatos por la santidad del Mishkán.
· Salpicaban la
sangre de los Korbanot sobre las paredes del Mizbeaj.
· Limpiaban la Menorá
y le cambiaban el aceite.
· Se sumergían en
una Mikve (aguas puras para purificarse).
· Moshé hacia 3
korbanot al día, así aprendían bien como se hacía.
· Moshé los ungió
con el aceite especial para ello.
· Se ponían las
ropas.
En Perashat Terumá, no se habló del Mizbeaj del incienso,
ubicado en el Kodesh. En esta perashá es explicado: Estaba hecho de madera,
cubierta de oro. Se usaba por la mañana y por la tarde. Allí se quemaba
incienso, que desprendía una fragancia muy rica. Para que entendamos esta
fragancia, les voy a dar un ejemplo: cuando alguien pasa por una panadería, al
oler el pan y las facturas recién horneadas, siente una gran tentación de
comprarlo. Así era el Ketoret: al olerlo, se le despertaba a uno el deseo de
volver en Teshuvá.
En el Mishkán (y luego en el Beit HaMikdash) había varios
milagros diarios y a la vista. Estos son algunos (algunos solo estaban en el
Beit HaMikdash I):
· El Arón (donde
se guardaban las lujot) con sus varillas debería ocupar todo el Kodesh
HaKodashim sin dejar espacio para que el Cohén Gadol entrara en Iom Kipur, pero
no era así, podía circular fácilmente.
· Todas las
semanas se cambiaba el pan del Shulján (¡una semana sin cubrir!) y cuando lo
sacaban, seguía igual que como recién hecho, incluso tibio.
· La luminaria
central de la Menorá no se apagaba, sólo lo hacía cuando el Cohén la extinguía
para limpiarla.
· Un fuego caía
del cielo para hacer los Korbanot.
· A pesar del
fuego en el Mizbeaj del incienso, la madera no se arruinaba.
· Nunca se vio una
mosca o hubo olor desagradable, a pesar de la cantidad de carne faenada.
· Todo el humo de los
Korbanot se juntaba en forma de columna.
· Había un fuego
permanente en el Mizbeaj, que no se apagaba siquiera por la lluvia o viento.