En Eretz Israel había un Sanhedrín (corte suprema de
justicia) integrado por 70 jueces y un presidente. Estaba en Ierushalaim y era
mayormente visitado por los casos más graves, de vida o muerte, en los 3
jaguim, festividades (Pesaj, Shabuot y Sucot). Igualmente, en cada pueblo debía
haber un Beit Din. Si tenía menos de 120 habitantes, sólo eran 3 jueces que no
podían definir casos de vida o muerte, sólo dinero, propiedad… Pero si eran más
habitantes, eran 33 jueces.
Siempre había que seguir la decisión del Sanhedrín. A
pesar de estar seguro de que se equivocan, hay que hacerlo debido a son humanos
y si Hashem hubiese querido que fuesen perfectos, habría puesto a Sus Ángeles a
juzgarnos.
De todos modos, los jueces deben ser justos, sin hacer
favoritismo ni aceptar soborno; siquiera recibir un favor. Para aplicar la pena
de muerte, debía haber mínimo dos testigos que digan lo mismo.
Es una gran Mitzva designar un rey. El que lo desobedece,
merece la pena de muerte. En la guerra, él es el primero en elegir del botín.
Está prohibido sentarse en su trono, usar su caballo o cualquiera de sus cosas,
o casarse con sus viudas (sólo lo podía hacer otro rey). Se le corta el
pelo todos los días, así siempre esta presentable y no podía tener ningún
defecto (ser rengo, tener lepra…).
El rey tenía Mitzvot especiales:
· No tener muchos caballos: antes
significaba tener mucho poder. Específicamente, explica “para que no vuelvan a
Mitzraim”, ya que allí se encontraban los mejores equinos.
· No podía tener demasiadas riquezas
almacenadas (le traerían orgullo), sólo lo necesario. Lo que sí podía hacer,
era juntar dinero para el Beit HaMikdash.
· No podían casarse con muchas mujeres
(harían que solo se preocupe por ellas y deje de estudiar). Como máximo, 18 (“¡qué
pocas!”).
· Debe tener consigo siempre un sefer
Torá y también uno guardado
· Debe ser humilde
Había 4 grupos de personas que no podían ir a la guerra:
a.
Si construyó una casa nueva, pero todavía no se mudó
b.
Si tenes un viñedo (los frutos no se pueden comer hasta los 4
años), tiene que esperar a comer sus frutos
c.
Un hombre comprometido o que está en el año que se casó
d.
Si tiene miedo
Había tantas excusas para no ir a la guerra para no hacer
pasar vergüenza al que no va por miedo, al no saber la razón de su ausencia.
De todos modos, esto tiene validez sólo en las guerras
“extras” (no las relacionadas con la conquista inicial de la Tierra o para
proteger sus límites; sino las que eran para obtener tierras o riquezas). En el
caso de las obligatorias, todos tenían que ir.
Cuando se iba a la guerra, estaba prohibido talar árboles
frutales, ya que son fuente de alimento.
Si se encuentra un cadáver en el campo y no se sabe quién lo
mató, los miembros del Sanhedrín tienen que medir la distancia desde él hasta
las ciudades de alrededor. Los sabios de la ciudad más cercana deben tomar una
becerra menor a un año con la que no se haya trabajado, llevarla hacia un valle
rocoso (Najal Eitán) y decapitarla. Luego, debían lavarse las manos sobre ella
y decir que eran inocentes de la muerte (obviamente ellos no lo hicieron, pero
cuando un extranjero llega a la ciudad, los sabios son responsables por él) y
los Cohanim pedían perdón por parte del pueblo.