martes, 28 de enero de 2014

Perashat Teruma

Hashem le pide a los Bnei Israel que construyan un Mishkán, “la casa trasladable de Hashem”, donde se harían Korbanot (sacrificios a Hashem) y Moshé hablaría con Hashem hasta la futura construcción del Beit HaMikdash, ya en la época del rey Shelomó. Hashem dijo que los Iehudim podrían donar, pero no estaban obligados. Necesitaban varios materiales distintos, pero ¿de dónde los sacarían?, estaban en un desierto.  Cuando salieron de Egipto, los egipcios les dieron oro, plata y más. Hashem le mostró a Moshé en el cielo cómo sería y cuáles serían sus partes:
1.     Kódesh HaKodashim: El lugar más santo, donde estaban las tablas.
2.     Kódesh: Ahí  estaba el Shulján (donde habían siempre 12 panes frescos; literalmente “mesa”), la Menorá (candelabro) y el Mizbeaj haKetoret (el altar del incienso).
3.     Jatzer (patio): Allí habían un gran Mizbeaj.
La perashá nos explica puntualmente como son cada uno de los objetos y partes del Mishkán:
·        Arón: Eran tres “cajas” apiladas, la primera y la ultima de oro y la del medio de madera. Tenía a los costados dos barras de madera bañada en oro con la cual los leviim lo cargaban. Arriba de todo tenía dos kerubim (en forma de ángeles con cara de niños, si se miraban significaba que había paz entre hermanos, pero si se daban la espalda, lo opuesto).
·        Shulján: Estaba hecho de madera recubierto de oro y tenía un borde de oro. Sobre ello habían dos filas de cinco estantes. Sobre el Shulján –no los estantes- se colocaban dos panes y en los estantes, 10. Cada Shabat se cambiaban las hogazas. Los panes viejos, aunque estaban en el mismo estado que recién sacados del horno, los comían los Kohanim.
·        Menorá: Estaba hecha en un solo bloque de oro. Tenía 7 brazos y cada uno ornamentado.
·         El techo: Eran 3 capas de toldos. La  superior era de piel de ternero tenida de rojo, solo cubría el techo (no sobresalía). La del medio era tejida con lana de cabra y cubría un poco el Kódesh. La inferior eran tejidos, obras de arte. Se llegaba a ver de adentro del Mishkán.
·        Las paredes: Eran hechas de vigas de madera de shitim (árbol) de 6 m. de alto.
·        Las 2 cortinas: Una estaba en el Jazter (patio) al entrar y la otra separando el Kódesh del Kódesh HaKodashim.
·        Mizbeaj de los animales: Era hecho con madera de shitim cubierta de cobre. Media 3 amot (1,80 m aprox.) de alto. Cada esquina tenía un cuadrado abierto de cobre. En la mitad tenía una tira de cobre con un diseño de flores. Debajo de eso, una “red” de cobre que dividía la parte superior de la inferior. Por adentro era hueco y cuando acampaban, lo llenaban de tierra. Tenía postes para trasladarlo.

·        Patio: Era rodeado por cortinas de red que no dejaban ver lo de adentro a los de afuera.

lunes, 27 de enero de 2014

Refuah Shelema

Por favor, R"SH Rafael Yitzjak Aizic ben Mijal y Jaim Shlomo ben Mijal y consuelo para los padres Shimon Ozer ben Tzipora y Mijal bat Rajel. Es una familia de Ierushalaim que les fueron a fumigar la casa y el producto no era el correcto y se pueden imaginar las consecuencias... Los chicos estan grave, los padres un poco mejor.

viernes, 24 de enero de 2014

La Torá es machista? Por Abraham Leib Berenstein

PARASHÁ MISHPATIM 
¿La  Torá es machista?

Mucha gente piensa que la Torá es machista por varias razones. Por ejemplo, cuando se ve gente religiosa caminando por la calle, las mujeres siempre van caminando detrás de los hombres, dando una imagen de que son menos importantes. También hay algunos que no entienden por qué el hombre dice la bendición en la mañana en la que agradece a Hashem que no lo hizo mujer.
Como estos casos hay muchos otros más que la gente, ya sea por ignorancia o por otra razón, piensa y también dice que el judaísmo es una religión machista.

Cuando caminan varios hombres y las mujeres van atrás es justamente para darle a la mujer el respeto que se merece, y no hacerla caminar adelante haciendo que otros hombres la vean de atrás.
También así como el hombre agradece a Hashem que no lo hizo mujer, porque el hombre tiene la obligación de estudiar Torá, cosa que es un placer, y la mujer no tiene esa obligación. Por otro lado la mujer agradece a Hashem todas las mañanas que la hizo según Su voluntad, ya que la mujer ayudando al hombre a estudiar Torá y a formar una familia, está cumpliendo con la voluntad de Hashem.

En esta parashá dice la Torá que el hombre tiene la obligación de darle a la mujer sustento, vestimenta y relaciones conyugales (21,10). Según el Rambam (leyes de ISHUT, cap.12) son tres cosas que el hombre está obligado por la Torá, y más allá de esas tres, el hombre tiene otras siete obligaciones que le impusieron los Sabios como ser comprometerse con una suma de dinero si la divorcia, curarla si se enferma, rescatarla si la toman cautiva y otras más.
También es una mitzvá de la Torá alegrar a la mujer el primer año de matrimonio especialmente, y después seguro que también.

El Rambam dice:” Honrar a la mujer más que a uno mismo, si tiene mucha plata que la use para ella (Rambam, Hal.Ishut cap.15 H.19)
Lo que dice el Rambam no es un consejo sino que es halajá (ley).

La guemará en Baba Metzia (59a) cuenta que Rav dijo: “que la persona tenga mucho cuidado de no hacer sufrir a su mujer, ya que ella llora con mucha facilidad, las lágrimas llegan al Cielo, y luego él va a tener que pagar por eso”. Más adelante está escrito: “Honren a sus mujeres, para así enriquecerse”.

Cuando Sará le vino a decir a Abraham Avinu que saque a su hijo Ishmael de la casa ya que era mala influencia para Itzjak, Abraham no quería hacerlo, entonces Hashem le dijo que escuche a Sará que tenía razón.

Como esos ejemplos hay muchísimos más en la Torá donde vemos que la mujer tiene un lugar más que importante, o mejor dicho, un lugar fundamental y único en el judaísmo.

Es sabida la historia del Rav Levin de Yerushaláim, un tzadik muy grande de la generación anterior que cuando llevó a su mujer a la cual le dolía mucho la pierna entraron al consultorio del doctor y el Rav le dijo: “doctor, nos duele mucho la pierna”.

El Rav Scheinberg, un tzadik que estuvo con el Jafetz Jaim y que falleció hace poco a la edad de casi 102 años, estuvo casado 80 años con su esposa. Yo tuve el mérito de conocer a los dos, y también ver en la casa de ellos el acta de casamiento. Unos años antes de que su esposa falleciera, ella ya no podía comer y solo la alimentaban por medio de tubos.
El Rav a pesar de ser uno de los más grandes tzadikim de nuestra generación, cada vez que iba a una fiesta como ser casamiento, brit milá, etc, siempre agarraba una porción de torta o algo parecido para llevarle a la rabanit. Al final cuando la rabanit ya no podía comer el Rav seguía haciendo lo mismo. Una vez un alumno que estaba con el Rav se sorprendió por eso y le pregunto: “Rav, perdón por la pregunta, pero ¿para qué le lleva algo a la rabanit si ella ya no puede comer?”. El Rav le contestó: “Yo tengo la obligación de honrar y respetar a mi esposa, y a pesar de que ella no puede comer, yo estoy interesado en demostrarle que estuve en un brit y pensé en ella, y eso no tengo dudas que la va a hacer feliz, por eso es que le llevo esta porción de torta”.

Yo personalmente hace 9 años fui del Rav Jaim Kanievsky y le pedí si podíamos con mi esposa ir a pasar un Shabat a su casa. El Rav me miró fijo y me dijo: “Yo no soy el dueño de la casa, tienes que hablar con la Rabanit”. Dicho sea de paso, cuando le pregunté a la Rabanit, con una alegría muy grande me dijo que podíamos ir a comer a su casa. Así fue que tuvimos el mérito de comer el viernes a la noche con ellos, y a pesar de ser ángeles, se comportaron de una manera muy pero muy sencilla.

También el Staipler, el padre del Rav Jaim Kanievsky, el cual era capaz de estudiar 36 horas seguidas, cada segundo del Staipler no tenía precio, así y todo una vez lo vieron en mitad de la noche lavando los platos de la cocina, y cuando le preguntaron por qué, dijo que seguro que cuando su mujer se levante y vea que está todo limpio, iba a tener una alegría muy grande.

Como estos ejemplos hay miles y miles ya sea en la Torá como en el día a día de nuestros Sabios, en los que se demuestra que la Torá no es machista en absoluto, sino todo lo contrario, le da a la mujer un lugar único e indispensable en el judaísmo, dándole todo el valor y el respeto que se merece.

En el mundo hoy en día, la mujer se exhibe como un objeto más de venta, se la rebaja hasta tal punto que muchas perdieron la vergüenza y el recato, algo natural y esencial en la mujer, el físico muchas veces es lo único que importa, y para mostrarlo no hay límites.

La Torá nos enseña absolutamente todo lo que necesitamos para vivir una excelente vida, nos enseña cómo ser papá, mamá, hijo, esposo y entre muchas otras cosas, nos enseña como respetar a la mujer.

Como siempre si seguimos los consejos del Dueño del mundo, nuestra casa siempre va a brillar de alegría, y la presencia Divina siempre va a estar con nosotros, siempre y cuando le demos a la mujer el lugar tan importante que tiene.

SHABAT SHALOM
ABRAHAM LEIB BERENSTEIN

sábado, 18 de enero de 2014

Perashat Mishpatim

Los Mishpatim son las leyes de cómo tratar al prójimo en distintos casos. Fueron enseñadas la noche de la entrega de los Aseret Adiverot (10 mandamientos). Algunos de ellos.
ü Uno que es vendido como esclavo:  Su amo, a pesar de ser su esclavo, lo debe tratar bien: 
·No lo puede vender
·Le debe dar la misma comida que él come
·Su cama debe ser igual de cómoda
·No le puede asignar trabajos degradantes o inútiles
·Solo puede hacerlo trabajar en un momento del día (o el día o la noche)
·El esclavo se puede casar con una goiá
·Sólo es esclavo como máximo 6 años
·Lo puede dar en libertad cuando quiera (antes de los 6 años)
ü Sirviente cuya oreja fue agujereada por su amo:   Si cuando pasaron los 6 años, el esclavo quiere seguir trabajando, se lo lleva a un tribunal de 3 jueces, donde le agujerean la oreja. Este seguirá trabajando para su amo hasta que muera.
ü Castigo a un asesino:   Es castigado con la muerte por la espada.
ü Maneras de ejecución del Bet Din (tribunal):
·     Estrangulamiento
·     Muerte bajo la espada
·     Quemado a través del tragado de plomo liquido
·     Lapidación: Se tira al castigado de una plataforma a 4 metros y medio del piso, si no muere, es aplastado por una piedra.
ü No se puede maldecir o herir a los padres: Si un chico mayor de bar (o chica de bat) mitzva, hace esto intencionalmente, es castigado con la muerte.
ü Cosas a pagar si uno hiere gravemente a otro: Tiene que pagar por 5 cosas en especial. Todo es calculado por el Bet Din:
·     Daño
·     Dolor
·     Cura
·     Indemnización laboral
·     Vergüenza
ü Pago al dueño de un animal que lastimo a alguien: Por los animales que son salvajes de naturaleza, se debe pagar el daño completo. En cambio, si es domestico, la mitad, a menos de que lo haya hecho ya tres veces. Si un animal mata a una persona o animal, este es apedreado hasta morir.
ü Los que tiene que devolver un ladrón:
·     Lo tiene que devolver o pagar lo que corresponda si se perdió el objeto
·     Si robo un cordero, tiene que pagar 4 veces su valor
·     Si robo un buey, paga 5 veces su valor
ü Que debe pagar una persona si usa un bien de otra persona y lo rompe:
·     Un cuidador por propia voluntad: Si uno cuida un objeto sin pago y lo rompe, no paga nada a menos que haya sido negligente
·     Cuidador pago:  Si se le rompió, no lo paga, pero si es robado o perdido, sí
·     Persona que lo alquila: Las leyes son las mismas que en el punto anterior
·     Si lo pide prestado: Si se rompe, pierde o es robado paga, a menos que se dañe  en su uso normal
ü Ser bondadoso especialmente con un converso, un huérfano o una viuda: No se le puede recordar al converso su pasado o engañarlo. Es bueno ayudar un huérfano o viuda ya que son más “frágiles”.
ü Algunas leyes de los jueces:  Hay muchas, algunas:
·     Debe escuchar ambas partes
·     Deben ser impares, mínimamente 3
·     Para casos de vida o muerte, deben ser al menos 23
·     Un rashá o una mujer no pueden atestiguar
·     No pueden aceptar soborno
ü No mezclar carne con leche: No podemos cocinar, comer, poner sobre la misma mesa o sacar provecho de la misma.

Moshe, después de la entrega de la tora, subió al cielo para recibir las lujot (tablas de la ley).

martes, 14 de enero de 2014

Tu Bishbat
Extraído de www.jabad.org.ar
El 15 del mes hebreo de Shevat es considerado el “Rosh Hashaná” de los árboles. Aquí enunciaremos 12 de las frutas recomendadas en el Seder, correspondientes a las 12 posibles permutaciones de las cuatro letras del nombre de Di-s, entre otras cosas.
Esperamos que este Seder se convierta en una experiencia liberadora y resplandeciente.
GUIA DEL SEDER
                                                                                   
1) Reúna un grupo de judíos. Todos deben ayudar con los preparativos, incluso buscando material para hablar

2) Adquiera la mayor cantidad de variedad de frutas que pueda (mirar lista debajo de las 12 primeras)

3) Compre por lo menos 2 botellas de vino Casher: uno blanco y otro tinto.

4) Prepare o adquiera galletitas o cualquier otra delicia preparada con harina (con prioridad a las de trigo y/o cebada.)

5) Prepare la mesa de forma festiva, incluyendo mantel, flores, etc.

6) ASEGÚRESE de que cada uno de los participantes sepa qué bendición debe recitar antes de cada comida (están impresas en todos los Libros de Rezos o folletos. Toda la ceremonia carece de sentido sin ellas.)

7) Comience sirviendo las masitas recitando la bendición de mezonot.

8) A continuación, la bendición de la fruta debe ser recitada sobre aquellas frutas con las cuales la Tierra de Israel ha sido bendita (vid, higo, granada, olivo y dátiles). Si no, aquella que usted más apetece

9) El primer vaso de vino debe servirse al principio. Debe recitarse la bendición y tomarse entre las masitas y la fruta.

10) PÁSELO LINDO, pero no lo tome tan a la ligera. Esta es una oportunidad única para lograr elevadísimas rectificaciones espirituales.

LAS 12 FRUTAS

1) HARINA: es la base de nuestro sustento, pero sólo luego de que hayamos trabajado para sembrarla y cosecharla, y luego prepararla. OLIVOS: Rinde el mejor de sus aceites cuando la fruta es aplastada. El aceite de oliva flota por encima de todos los líquidos. DÁTILES: Son usados como metáfora con respecto a los tzadikim (justos), ya que el árbol de dátiles es noble y da buenos frutos. Además, el árbol de dátiles es impermeable a los cambios de vientos, y así es el Pueblo Judío.
2) VID: Pueden ser transformadas en diferentes tipos de comida (pasas de uva) y bebidas (vino); de la misma forma, cada judío tiene el potencial para ser exitoso en diferentes aspectos de la observancia de la Tora y las mitzvot.
3) HIGOS: Deben ser cosechados tan pronto como hayan madurado, pues se echan a perder muy rápidamente. Así mismo nosotros, debemos ser resueltos y rápidos para cumplir las mitzvot que se nos presentan, antes de que la oportunidad se “eche a perder”.
4) GRANADAS: Se dice que posee exactamente 613 semillas, igual al número de mitzvot que hay en la Torá. ¡Pruebe contarlas! De todas formas, cada judío está repleto de méritos como la granda posee semillas.
5) ETROG (CITRÓN): Se considera una fruta extremadamente hermosa, y posee una gran importancia durante la Festividad de Sucot. El Etrog permanece en el árbol a lo largo de todo el año, obteniendo beneficio de las cuatro estaciones, y uniéndolas. Representa al judío que trata de ser íntegro espiritualmente.
6) MANZANAS: Les toma 50 días madurar. De la misma forma, los iehudim “maduraron” y aún maduran, durante los 50 días que hay entre Pesaj y Shavuot. Y así como el manzano primero da el fruto y luego la hoja, los judíos primero hacen los preceptos sin ningún pre-requisito de comprenderlo todo.
7) NUECES: Se divide en cuatro secciones, que corresponden a las cuatro letras del nombre de Di-s. De la misma forma en que la nuez posee dos cáscaras, una dura y una blanda; nosotros también debemos pasar por dos circuncisiones, una física y otra espiritual.
8) ALMENDRAS: representan el entusiasmo en el servicio a Di-s, pues el almendro es el fruto que más rápido florece.
9) ALGARROBO: es el fruto que más tarda en crecer. Esto nos recuerda que debemos invertir muchos años en el estudio de la Torá para alcanzar y merecer un claro entendimiento.
10) PERAS: aunque es posible hallarlas de diferentes tipos y formas, siguen manteniendo una afinidad muy cercana. Esto señala la unidad del pueblo judío a pesar de las diferencias.
BENDICIONES
Las frutas crecen por la Voluntad de Di-s. No pronunciarlas puede colocar a toda la Creación en peligro. Además el bendecir antes de comer no ayuda a concentrar nuestras mentes en la energía y potencial vital para la elevación de la comida. Y por cierto, le otorgamos al mundo la beneficencia Divina que puede ser canalizado a través de la bendición.
SHEEJEIANU
El comer una fruta por primera vez en el año, se considera una razón de alegría y se recita la bendición de Sheejeianu. Se debe hacer un esfuerzo para conseguir una fruta nueva en Tu’bishvat.
CUATRO COPAS DE VINO

El espíritu de la ocasión requiere tomar vino blanco en el comienzo del Seder y vino tinto al final. Algunos acostumbran tomar cuatro copas de vino, paralelas a las cuatro que tomamos en Pesaj. La primera debe contener sólo vino blanco. La segunda, mayor cantidad de vino blanco. La tercera, mitad por mitad. Y la cuarta sólo vino tinto.

Perashat Itro

Primero tengo que aclarar, que como la Torá no es un libro de historia, no figuran los hechos en el orden en que sucedieron.
Como se deben acordar, Tzipora (la esposa de Moshé) y sus dos hijos, se quedaron en Midián con el suegro de Moshé, Itró, quien había escuchado de los milagros que hizo Hashem a los Iehudim en el desierto y quería unirse a ellos.
Cuando llegaron, Moshé y Aarón los fueron a recibir. Al ver esto, todos los Iehudim fueron a su encuentro. Ese mismo día, se hizo el Brit Milá.
Itró al ver que todos los días Moshé se quedaba escuchando a los judíos, por si tenían un pedido, una pregunta, un juicio, etc. se le ocurrió una idea: podría designar jueces menores que resolverían los casos más fáciles, otros jueces los problemas un poco más difíciles, y Moshé sólo los más difíciles de todos y Hashem aceptó la propuesta.
Los Iehudim se preparan para la entrega de la Torá: se amigan entre ellos y hacen Teshuvá.  El Shabat 6 de Siván (según una opinión) del año 2448 fue el día que la recibieron. En la Torá no figura explícitamente el día exacto en que la recibimos, ya que en realidad constantemente la obtenemos. Moshé les dijo que él les iba a decir los 10 mandamientos, pero ellos querían que Hashem lo haga y Hashem aceptó. Nadie podía pasar el límite de la montaña, el Har Sinai. Empezaron a sonar truenos y shofarim por todo el mundo. Los enfermos, rengos, ciegos, lastimados, etc. se curaron. Hashem comenzó a hablar y el mundo tembló. Primero dijo todos los mandamientos al mismo tiempo, así todos sabían que era Él, ya que ninguna persona o ángel podría hacerlo; pero nadie entendió nada; así que Hashem repitió lentamente el primero, pero el alma de los Iehudim de la emoción salió de sus cuerpos y Hashem los revivió. Esto mismo pasó con el segundo, pero ya al  tercero,  pidieron que Moshé siga.
Los diez mandamientos:
I.            Yo soy Hashem  tu D”S, que te saqué de Egipto.  La Mitzvá es creer que Hashem es nuestro D”S y es el Creador.  Hashem sabe todo, lo que decimos, pensamos, hacemos y actuamos.
II.            No tendrás otros dioses.  Solo hay que servir a Hashem, nos está prohibido servir a cualquier otro ser, cosa, persona, etc.
III.            No jurar en nombre de Hashem en vano.  No hay que decir ni jurar en nombre de Hashem, inútilmente, o en falso: No hice la tarea y juro en nombre de Hashem que si la hice o decir, te juro que el cielo es azul, porque es obvio.
IV.            Recuerda el día del Shabat para santificarlo porque Hashem creó el mundo en 6 días y el séptimo, descansó.  Hay muchas maneras de hacerlo, una, por ejemplo, es separar parte de las compras especialmente para Shabat o llamar a todos los días “primer/segundo/tercero/etc. día desde Shabat”.
V.            Honrarás a tu padre y a tu madre. El que cumple esta mitzva es recompensado con larga vida y Olam habá. Parece que repetir dos veces “y a” (ve et en hebreo) es redundante, pero es para incluir también a los abuelos, mayores, hermanos más grandes, padrastros…
VI.            No asesinarás. Tampoco ser amigos o socios de asesinos.
VII.            No cometerás adulterio.  Se refiere a no casarse con mujeres/hombres no judías/os, o casadas/os. Para la mujer, tener varios esposos. Si una mujer casada no sabe si su esposo vive, hasta no saberlo con exactitud, no se puede casar y se la denomina Aguná (“abandonada”), cosa que pasaba cuando los hombres iban a las guerras y a veces no volvían.
VIII.            No robarás o secuestrarás. Aunque sea una cosa mínima.
IX.            No darás en falso testimonio. No importa que sea para ayudar a un amigo, o perjudicar a un enemigo, no lo debemos hacer.
X.            No codiciarás. Si vemos que alguien tiene algo que queremos, no tenemos que molestarlo  para que nos lo dé o venda.

Al final da algunas leyes de cómo construir el Mizbeaj (donde se hacían los sacrificios antes de existir el Beit HaMikdash).

martes, 7 de enero de 2014

Perashat Beshalaj

Los Iehudim ya habían salido de Egipto, pero ahora tenían que llegar a Eretz Israel.  Había dos caminos, uno más corto que pasaba la tierra de los Pelishtim (Filisteos), el cual no eligieron porque a la primera batalla, los Iehudim querrían volver a Egipto. En cambio, Hashem los condujo por alrededor de la tierra de los Pelishtim, y entrarían a la Tierra Prometida por el lado Este.
Para guiarlos en el desierto, Hashem mandó una nube de día y una columna de fuego por la noche. Además, seis nubes más: una en cada punto cardinal, una arriba y otra debajo de sus pies para protegerlos del calor, frío, escorpiones, atacantes...
Los Mitzrim quieren que vuelvan,  y salen a perseguirlos ya que realmente el trato era para volver a los tres días en los cuales harían korbanot a Hashem.  Hashem ordena a Moshé que los Iehudim retrocedan, así los egipcios estarían más cerca.  Al darse cuenta los Bené Israel de que eran perseguidos, se aterraron. Hashem hizo que la nube que los guiaba, vaya detrás de ellos, así atrapaba las lanzas.
Moshé les dijo que siguieran camino, a pesar que lo único que había era el Iam suf (mar Rojo/de los juncos).  Primero entró Najshón ben Aminadav y cuando el agua le llegaba al cuello, Hashem abrió las aguas.  Cuando salió el último Iehudí, las aguas se cerraron, ahogando a cada uno de ellos. Todos los Mitzrim habían entrado en el mar, y eran castigados terriblemente. Por más que quisieran salir, no podían. Al salvarse, los judíos, cantaron una canción profética en agradecimiento, Shirar HaIam que la decimos en la tefilá de Shajarit (Vaiosha y Az Iashir Moshé…).
Ahora se estaban dirigiendo a Har Sinai, donde luego recibirían la Torá. En el camino, Hashem los probó con falta de agua en Mará (una ciudad cuya agua es muy amarga). Moshé tiro una rama de olivo (amarga) y se hizo dulce.
Al pasar un mes, se les acabó la comida, y se quejan del hambre. Les fueron a pedir pan y carne (la carne no era necesaria, ya veremos como Hashem les da igual). Las características de sus comidas:
v Pan: Llamado Man. Los llenaba. Era blanco y tenia gusto a comida frita en miel. Los tzadikim, podían sentir el gusto que querían. Caía todas las mañanas menos el sábado, pero el viernes ración doble.
v Carne: Llamado Slav. Para comer, darse el gusto. Era un ave que venía del norte al desierto en busca de calor. Cuando llegaban, estaban tan cansadas, que volaban bajo y eran fáciles de agarrar. Caía de noche, no podían presenciar el milagro.
La medida que tenían que agarrar era de un omer (4 litros aprox.), aunque tomen de menos o de más, siempre tenían lo mismo.  Los que sobraba del Man, se derretía y se convertía en agua para tomar; pero si tomaban de más por miedo a que al día siguiente Hashem no mandaría, se volvía gusanos.
Este milagro del Man que se derretía no duro todo el tiempo, en cambio después para obtener el agua Hashem ordenó a Moshé que golpeara una roca, de la cual saldría agua y los acompañaría toda la travesía. La llamaron la fuente de Miriam porque sabían que era en merito suyo.

Hashem les envió a Amalek a que los atacaran. Moshé subió a una montaña a hacerle tefilá a Hashem. Toda la guerra estuvo con las manos levantadas. Al final, ganaron.

jueves, 2 de enero de 2014

Perashat Bo

Al igual que la perashá pasada, les iré explicando varios aspectos de la plaga:
1.     Hashem puso el orden de ellas como un General de Guerra. ¿Cómo lo relacionamos?
2.     ¿Por qué la recibieron?
3.     ¿De qué se trató?
4.     Duración y finalización
Octava plaga: Langostas (Arbé)
1.     Luego, un general, entra con su ejército y destruye todo lo que quedó, al igual que las langostas que se comieron todo y lo destruyeron.
2.     Los egipcios pedían a los Iehudim que les cuiden sus campos. Todos fueron destruidos.
3.     Sopló un viento fuerte que llenó todo el cielo de langostas. ¡Eran tantas que impedían que pasara la luz solar! Destruyeron absolutamente todo lo que quedó de comida de las plagas anteriores.
4.     Paró los dejó salir, pero sólo los hombres, ya que a su parecer los niños y mujeres no tenían nada que ver con el servicio a Hashem. Estaba equivocado. Para la Torá, todos somos muy importantes. Como los egipcios decían que se morirían de hambre, Moshé hizo tefilá para que se vayan las langostas. Vino una ráfaga de viento, y se las llevo, incluyendo a las que habían puesto en conserva para comer.
Novena plaga: Oscuridad (Joshej)
1.     Aprisionan a algunos de los enemigos. Hashem hizo una oscuridad tan fuerte, que los aprisionó.
2.      
1)    Los hacían llevar sus antorchas en calles oscuras.
2)    Habían judíos que no merecían salir de Egipto, en esta plaga, murieron sin pasar vergüenza.
3)    Idolatraban al sol
4)    Los hacían trabajar de todo el día, se levantaban antas del amanecer.
3.     Los primeros 3 días la oscuridad del día era más oscura que la noche y la noche más aun. No veían absolutamente nada. Pero al cuarto día, empeoró mucho: ni se podían mover, era una oscuridad “pesada”. Permanecieron en la misma posición por tres días. En esta plaga, los Iehudim entraban a los hogares egipcios y revisaban las cosas (sin llevárselas), así cuando saldrían de Egipto, les dirían que les den oro y plata. Si negaran su existencia, dirían: “dame oro que lo vi en tu segundo cajón”, y así se lo darían.
4.     Duró 6 días en total. En general, las plagas duraban una semana, pero acá el último día fue reservado para cuando se abrió el Iam Suf, donde los egipcios no veían nada (ya desde antes de entrar allí). Moshé fue a hablar con Paró, pero no los dejaba salir con los animales, ya que sabía que eran su riqueza y que no se escaparían y los dejarían allí y si lo hacían, Paró se enriquecería mucho por ellos. No aceptaron salir, con la excusa de que no sabían cuantos animales sacrificarían.
Hashem les ordena que cumplan dos Mitzvot: Korbán Pesaj y Brit Milá (los que no lo tenían) ya que sin él, no se puede comer el Korbán. Además, le enseña a Moshé la Mitzvá de Rosh Jodesh, del inicio del nuevo mes, el cual comienza con la luna nueva; y que la cuanta de los meses comienza en Nisán.
Desde el 10 de Nisán debían tomar un cabrito/ovino macho, el cual era el dios egipcio, sin defectos y nacido ese año. Si eran pocos, se juntaban entre varios vecinos. Ningún egipcio dijo nada, un milagro. Además, vieron que no tenía fuerza ya que si no, se hubiera escapado.
El 14 de Nisán a la noche, todos los Iehudim hicieron el Korbán y con su sangre pintaron las jambas y el dintel de las puertas. Esto lo hacían para que todos los Mitzrim se den cuenta de que lo hicieron (los hayan visto haciéndolo o su sangre). Otra explicación es para que se forme una Jet (ח), de la palabra Jaim (vida).
También comían matzá y maror (hiervas amargas). Era un desprecio para el cabrito ser comido con maror ya que generalmente, uno algo rico, lo acompaña con cosas que no rebajen su sabor, en cambio a este lo comieron con amargo.
El Korbán tenía que estar asado así todos lo olían y es una manera rápida de cocinar. Tenía que estar completamente cocido, si entraba un Goi en el momento del asado, no lo podían sacar y decir “ya está cocido” por miedo a este a cuyo ídolo estaban asando. Tenía que distinguirse que era un cabrito, no lo podían cortar en trozos más chicos en la cocción.
Debían terminar de comer el Korbán hasta antes de que se haga de día y lo que sobraba había que quemarlo (según algunos, cuando terminaba Iom Tov).
Los primeros y los últimos (1 en Israel y 2 en los demás lugares) son Iom Tov y los días de entre medio, Jol HaMoed. Esos días nos esta prohibido comer jametz (alimentos leudados) o sus derivados.
Decima y ultima plaga: Muerte de los primogénitos (Makat Bejorot)
1.     Al final, matan a los líderes, los primogénitos eran los sacerdotes o personas importantes (como Paró, pero no murió).
2.     Los egipcios los habían obligado a matar a sus hijos (Iehudim).
3.     Hashem bajo a media noche y mató a todos los primogénitos egipcios, a sus animales (primogénitos) y destruyo todos los ídolos. Estaban incluidos tanto los egipcios fuera del país como extranjeros en Mitzraim. El Pasuk menciona además a los presos primogénitos, los cuales murieron para que no digan que sus dioses mataron a los egipcios para vengar su captura. Salteó (Pasaj) las casas de Iehudim, por eso el Jag se llama Pesaj. No había casa de mitzrim sin algún muerto: fallecía el primogénito, si no estaba, el hijo más grande que le siga. Además, hombres y mujeres cometían adulterio, por eso, cada uno tenía varios primogénitos y todos fallecían.
Paró toca puerta por puerta judía preguntando dónde estaban Moshé y Aarón, cuando lo encuentra, obliga salir a todos con hijos, animales, esposas, etc. No salen a la noche como ladrones, sino que de día.
Los Iehudim salieron llenos de riquezas que se las pidieron a los egipcios. Moshé se encargó de encontrar a Iosef (donde estaba enterrado). Una mujer anciana, Seraj la hija de Asher, le mostró que estaba en el río. Moshé tiro un papel de oro que decía aalé shor/sube toro (Iosef es comparado con un toro) y el ataúd subió. Los mitzrim lo habían escondido ahí ya que sabían que los Iehudim no se irían sin él.

En total salieron 600.000 hombres grandes de Mitzraim. Además, había un grupo de goim que se maravillaron con Hashem y se convirtieron, llamados “Erev Rab” (gran mezcla, taarovet).